Los Mayores Cuentan

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Danzas del mundo en el Parque del Oeste – 18 de junio de 12:00 a 14:00

Danzas del mundo en el Parque del Oeste – 18 de junio de 12:00 a 14:00

Le damos las gracias a Gloria Rosa García por mantenernos al día la información de esta actividad tan atrayente.

¿Te gusta bailar? ¿Te apetecería bailar con música en vivo en un parque madrileño? Se trata de una actividad organizada por profesionales, gratuita y no requiere reserva previa.  Y no tienes que saber bailar, porque cada baile lo explican muy bien al inicio.

En Madrid hay diversos puntos de baile al aire libre, todos gratuitos y abiertos a cuantos se quieran unir a cada sesión.

El domingo 18 de Junio de 12:00 a 14:00 habrá una sesión dinamizada por Virginia Gago con música en vivo por parte del grupo folk Raksedonia.

El lugar de este encuentro es el Templete de música de Rosales, en el Parque del Oeste, debajo del Templo de Debod, junto al aparcamiento. Calle Profesor Martín Almagro Basch, 53

La actividad es gratuita, con aportación voluntaria.

Reapertura del Parque Tercer Depósito

Reapertura del Parque Tercer Depósito

Tras dos años de espera y una reforma de 10 millones de euros, el Parque Tercer Depósito del Canal de Isabel II ha reabierto sus puertas el pasado 21 de Mayo.

Ubicado sobre el histórico tercer depósito de agua del Canal de Isabel II y dentro de una parcela de 12 hectáreas, cuenta con 55.000 m2 de áreas verdes dedicadas a jardines, áreas para caminar y diversos usos lúdicos, deportivos y culturales.

Un verdadero “pulmón verde” para el distrito de Chamberí que los vecinos de Tetuán también disfrutaremos.

Con la visita virtual que puedes hacer a través del siguiente enlace podrás tener una idea precisa del renovado parque:

 https://www.canaldeisabelsegunda.es/estatico/parque_tercerdeposito/inicio.html

 

El primer timo piramidal de la historia

El primer timo piramidal de la historia

Imagen de portada: Ilustración de Blanco y Negro sobre la historia del timo de Doña Baldomera.

Le damos las gracias a Basilides Manso por traernos un episodio tan curioso y poco conocido de la hisitoria de nuestra ciudad.

Baldomera Larra nació en Madrid 1833, fue la tercera hija de Mariano José de Larra, aunque nunca la reconoció como suya. Fue bautizada como María Dolores pero en la confirmación se cambió el nombre por el de Baldomera.

Se casó con Carlos Montemayor, médico personal de Amadeo I, y cuando éste se marchó de España en 1873 Carlos Montemayor se exilió a Cuba, dejando a Baldomera con tres hijos y ningún dinero. Cayó enfermo uno de sus hijos y se vio obligada a pedir dinero a un prestamista, 16 duros y a devolver 32 duros que fueron pagados a su vencimiento.  Lo que hacía era pedir dinero a unos y a otros y así iba pagando las deudas.

Con lo aprendido de fiadores y prestamistas, en 1876 creó la Caja de Imposiciones que tuvo varias localizaciones hasta que terminó en la plaza de la Paja, en el interior del antiguo Teatro España. Ofrecía unos buenos intereses (llegó a ofrecer hasta un 30% mensual por cada duro depositado) y tenia largas filas de pequeños ahorradores en sus oficinas para prestarle dinero, ya que dada la mala situación política y económica que atravesaba el país, la gente quería que sus ahorros les dieran una renta.  Los pagos los hacía con el dinero de los nuevos inversores. En realidad, lo que Baldomera había organizado era el primer timo piramidal de la historia de España.

Al caer la I Republica, acuciada por sus casos difíciles, huyó de España con 20.000.000 de reales dejando 5.000 estafados. En 1878 volvió a España, no se sabe si voluntariamente o extraditada por Francia. Tras ser juzgada y condenada a 6 años de cárcel, cambió de abogado y nombró a Felipe Aguilera, quien recurrió al Supremo. Como la mujer casada, era irresponsable de sus actos económicos sin la firma del marido, y como los recibos de los clientes no tenían esta firma, fue declarada inocente en 1881 y los recibos del préstamo nulos.

El pabellón de los hexágonos

El pabellón de los hexágonos

Le damos las gracias a Francisco Pérez por este interesante reportaje de una de las joyas arquitectónicas más deconocidas de Madrid. 

Se incluye en las visitas guiadas del Programa Pasea Madrid 2023 del Ayuntamiento.

El Pabellón se encuentra en la Casa de Campo de Madrid. Fue ideado para representar a España en la Exposición Universal (Expo) de 1958 que se celebró en Bruselas. Era la primera Expo que tenía lugar después de la Segunda Guerra Mundial y ha quedado en el recuerdo por el Atomium, pabellón belga. Todos los países recibieron indicaciones para que se esmeraran al presentar sus locales e incluyeran propuestas sobre el hombre y el progreso. Además, los pabellones debían respetar el terreno de la Expo sin modificarlo y llevarse a su país de origen el pabellón, una vez concluida la Expo.

Con estas condiciones, el Ministerio de Asuntos Exteriores de la época, responsable del Pabellón eligió el proyecto de dos arquitectos, José Antonio Corrales y Ramón Vázquez Molezún por su originalidad. Concibieron un edificio con dos alas de acero y cristal coronadas por un techo compuesto por 130 hexágonos, con forma de paraguas de seis metros de alto y tres de lado sostenidos por otras tantas columnas delgadas de acero huecas que servían de desagüe. El resultado era una estructura ligera y luminosa que ganó la Medalla de Oro como primer premio de arquitectura de la Expo. El interior se decoró con elementos representativos de las regiones españolas y de la América hispana.

Al término de la Expo, el edificio fue desmontado y traído a Madrid por el Ministerio de Agricultura que entonces se encargaba de la Feria del Campo. Se reconstruyó añadiendo paredes de ladrillo mezcladas con el acero y cristal original, constaba de dos patios interiores cerrados y uno abierto y se instaló en la Casa de Campo, en el gran recinto que ocuparon los pabellones de la Feria.

La Feria del Campo se clausuró en 1975, algunos pabellones fueron utilizados como restaurantes y otros quedaron cerrados y abandonados. Esa fue la suerte que corrió nuestro pabellón durante décadas. Todas las instalaciones de la Feria pasaron a depender del Ayuntamiento de Madrid tras diversas decisiones de los tribunales.

La restauración del Pabellón la comenzó el Ayuntamiento entre 2018 y 2019, los interiores están finalizados y quedan pendientes algunas reformas en el exterior.

El acceso puede hacerse caminando desde las estaciones de Metro Alto de Extremadura (600 metros) y Lago (1.100 metros). Las visitas se hacen dentro del Programa Pasea Madrid.

 

Toros en la Gran Vía

Toros en la Gran Vía

Muchas gracias a Basilides Manso por contarnos esta historia tan pintoresca y desconocida de nuestro Madrid.

El día 23 de enero de 1928 en Carabanchel Bajo se escaparon un toro bravo y una vaca cuando una manada era conducida al matadero. Cruzaron el puente de Segovia siguieron por el paseo de la Virgen del Puerto y la cuesta de San Vicente hasta llegar a la Plaza de España, sembrando el pánico por toda la plaza. Se cerraron las tiendas y los puestos se abandonaron mientras algunos espontáneos intentaban distraerlos.

Subieron por la calle Leganitos, donde hirieron gravemente a Juana López, de 66 años, y dos ancianos. En el mercado de San Ildefonso sembró el pánico, con puestos destrozados, tiendas cerradas, gente corriendo y  un sordo herido, que pasaba por allí y no se enteró del jaleo.

A las 11 de la mañana el toro llegó a la Gran Vía, por donde estaba paseando el torero Diego Mazquiarán alias «Fortuna».  Apartando a su mujer para que fuera a sitio seguro, se quitó el abrigo y empezó a dar capotazos al toro. Del vecino Casino Militar le trajeron un sable, pero no servía para matar al toro, y pidió que fueran a su casa, en la vecina calle de Valverde, a por un estoque. Tardaron 15 minutos en traerlo, mientras él seguía dando pases al toro.

Le dio una estocada ante el aplauso general, pero al ver que el toro seguía vivo, los que avanzaban retrocedieron rápidamente. Fortuna cuadró otra vez al toro y con una estocada en todo lo alto acabó con la vida del morlaco. Vitorearon al matador, le llevaron a hombros hasta un café de la calle de Alcalá e incluso le ofrecieron una oreja que cortaron al toro.

En Vallecas aquel año pasó algo parecido, pero allí no estaba Fortuna mientras la policía mantenía el orden en la Gran Vía, y un Guardia Civil montado en un taxi persiguió al toro y lo remató de un tiro.

A Fortuna, a petición popular, le concedieron la Cruz de Beneficencia por su gesta.