
Le damos las gracias a Basilides Manso por traernos un episodio tan interesante de la historia de Madrid.
Durante el reinado de Fernando VI el padre Martín Sarmiento, escritor y erudito benedictino, presentó al rey un proyecto para embellecer el exterior del Palacio Real con estatuas de 120 reyes de España, desde Ataulfo hasta Fernando VI, con la idea de enseñar al pueblo de manera visual la historia de la monarquía española.
Aceptada la propuesta, los trabajos se realizaron entre 1750 y 1754, con gran despliegue logístico e inversión económica. Se contrataron más de 20 artistas que trabajaron bajo la dirección de los escultores de la Corte, el italiano Domenico Olivieri y el gallego Felipe de Castro. Algunos escultores eran de reconocido prestigio, como Roberto Michel (autor de La Cibeles), Juan Pascual de Mena y Luis Salvador de Carmona. Los bloques de piedra caliza blanca se traían en bruto desde Colmenar de Oreja a Madrid, previamente desbastados, y se repartían por los distintos talleres.
Las estatuas estaban inicialmente destinadas a la cornisa del palacio y se desconoce a ciencia cierta cuántas se instalaron, pero sí se sabe que el 8 de febrero de 1760 Carlos III dio la orden de bajarlas inmediatamente. No está documentada la razón de tal decisión y los historiadores no se ponen de acuerdo. Algunos creen que la decisión se debió a que la madre del rey, Isabel de Farnesio, soñó que un gran terremoto asolaba Madrid y las estatuas caían sobre ella aplastándola. Otros aluden al excesivo peso de las esculturas y otros al cambio de los gustos estéticos.
Pero el caso es que las esculturas se bajaron a los sótanos del palacio y allí permanecieron hasta que la reina Isabel II llegó al trono (1843) y decidió sacarlas y repartirlas por Madrid y otras ciudades españolas como como Toledo, El Paular, Pamplona, Burgos, Vitoria o Aranjuez.
La orden de Carlos III incluyó borrar el nombre de los reyes del pedestal de las esculturas y ello trajo sus problemas cuando finalmente se quisieron identificar e instalar las estatuas: ¡Leovigildo y Sancho IV acabaron con dos estatuas cada uno!
Actualmente se encuentran en Madrid 77 de estas estatuas, de las cuales 29 están en distintas ubicaciones del Palacio Real. Otras están instaladas en la Plaza de Oriente, los Jardines de Sabatini, el Paseo de las Estatuas del Retiro y el Salón del Reinos del antiguo Museo del Ejército.