
Las calles de Mayor y Alcalá son cañada real, lo que significa que los animales tienen prioridad de paso en esas calles. Para reivindicar las cañadas en toda España, su conservación y cuidado los pastores con su rebaños pasan desde 1994 una vez al año por dichas calles recordando cuando por Madrid pasaba una Cañada Real.
El recorrido es corto, los pastores y sus ovejas salen de la Casa de Campo, recorren Mayor y Alcalá hasta la plaza de la Independencia y regresan por el mismo camino a la inversa.
Para los madrileños es una fiesta y llevan a sus hijos para que vean centenares de ovejas andando por la calles de Madrid. El mayoral entrega al Ayuntamiento la cantidad simbólica de 100 maravedíes por el aprovechamiento de los pastos de las dehesas y prados de la ciudad, tal y como se dispuso en la Concordia entre los Hombres Buenos de la Mesta y el Concejo de la Villa del 2 de marzo de 1418.
En la plaza de la Independencia entre las calles de Alcalá y Serrano se conservan dos pequeños mojones de la Cañada Real con la inscripción “Cañada de 75,23 m”, que pasan desapercibidos para los que no sepan que están en ese lugar. Las cañadas debían cumplir el requisito de contar con un ancho mínimo de 75,23 metros, de ahí la curiosa inscripción que podemos ver en estos mojones.
La fiesta de las ovejas se celebra cada año en domingo a mediados de octubre.
